Cuando me propuse escribir un blog (bitácora, le llaman algunos), pensé que sería lo más sencillo escribir a diario, o por lo menos más seguido, pensando en que cada día hay acontecimientos de sobra que vale la pena comentar, aún cuando me queda claro que esto es más que nada una charla conmigo mismo, digo, porque soy mi único lector; el caso es que me equivoqué y resulta que pasan días sin que pueda siquiera hacerle una visita, mucho menos escribir algo. Así es que al paso de los días las entradas se limitan, lo que no significa que ya me haya echado para atrás en este intento. Aquí voy de nuevo y aunque ahora me reporto nada más para decir que acá ando, sí hay varias cosas en mente y también avanzando en proyectos para compartir.
Asi es que, desde Guachochi un saludo cordial, fraterno y cálido, pese a las bajas temperaturas y a las heladas que estas últimas noches se han dejado caer por este pedazo de Sierra Tarahumara. ¡Salud y buenas vibras!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Son bienvenidos todos los comentarios que se expresen de forma constructiva y respetuosa. Saludos!